Lowani Malawi

martes, febrero 13, 2007

Mi mamá me mima... y yo a ella se las hago pasar putas.


Ya se marchó Marina y para todos los que me lo preguntastéis, es mi madre, pero leí vuestros mail tarde, así que no pude mandar su móvil a tiempo... y menos mal, porque sólo con los que la conocen ya fue una avalancha de regalos y cartas y demás... que agradecí no sabéis cuánto.

Se fue ayer después de dos más que intensas semanas y aquí, públicamente, le voy a pedir que nos cuente su experiencia a ver si alguien más se anima... que ahora en e-dreams te lo ofrecen por 300 el vuelo (aunque no hay quien se lo crea). Así que Marina, sé que no me vas a defraudar, cuelga el relato de tu estancia aquí en el Blog para que todos podamos leerlo. Besos mamá.

Sólo os cuento una de las historias que vivió: Por la mañana nos fuimos a visitar un hospital rural y todo muy normal, incluso un par de cervezas con las monjas que lo llevan... ningún contratiempo. LLegamos a casa a eso de las 4:30 pm y era el primer día que hacía sol en semanas, así que les dije a ella y a la amiga que vinieran con uno de mis compañeros y conmigo a un poblado, donde vive una abuela que cuida cinco nietos, la más pequeña un bebé de 5 meses (esta historia os la cuento otro día) ya que se habían quedado sin comida días atrás, pero con lluvia era imposible llegar, así que había que aprovechar. Motos... carretera... camino... De repente, un montón de barro y su amiga y mi compañero se caen de la moto, les quitamos la moto de encima, están bien pero no podemos ir mas que andando. Empezamos a caminar pero se hacía de noche (aquí a las seis y media noche cerrada) así que en un pueblo cercano conseguimos cuatro mozos que nos llevan en bici a casa de la abuela... casi de noche llegamos... saludos... presentaciones... La señora, agradecida por la visita y la comida, le regala a mi madre lo mejor que puede ofrecer... ¡¡¡UN POLLO VIVO!!! Escuálido pero vivo. Así que de vuelta con las bicis y el pollo. Cuando llegamos a las motos, la de mi compi sigue sin funcionar, así que decido mandar a mi madre y a la amiga con los dos muchachos de las bicis a la carretera principal, a que nos esperen allí. Ya era noche cerrada. Pongo mi moto en marcha y por supuesto sin luces (soy un desastre), me pongo un frontal en la cabeza y empiezo a avanzar entre el barro y los maizales sin ver más allá de un metro... el frontal casi sin pilas... se me ocurrió llamar por móvil, pero no tenía saldo (aquí compras tarjetas, no hay contratos). Llegamos donde mi madre y trato de hacer hincapié en la noche estrellada tan bonita. No para ningún coche. Por fin decidimos: mi colega se va en la moto con el frontal y mi madre a buscar un coche yo me quedo con la amiga. Al final consegimos parar un “pick up” y llegamos al hospital antes que ellos... ¿Cómo vamos a ir a casa así?... Al bar... con moto, con frontal, con pollo, cansados y llenos de barro, pero nos reímos... al menos mi madre se ríe. Por un momento pensé que me iba a matar... Después de dos cervezas le pusimos nombre al pollo... Mavuto, en chichewa... problema.

Besos a todos........... y mamá, a pesar de los
percances espero que hayas disfrutado.